El Ayuntamiento de Madrid ha decidido otorgar un año adicional de margen a los conductores que poseen vehículos sin etiqueta de la DGT, permitiéndoles circular por la Zona de Bajas Emisiones hasta 2026. Esta medida ha reavivado el debate sobre la contaminación vehicular en la ciudad, mientras se mantienen vigentes las ayudas para la renovación de vehículos.
La decisión de posponer la entrada en vigor de restricciones más estrictas ha generado opiniones encontradas entre los ciudadanos y los partidos políticos, quienes cuestionan la efectividad de las medidas implementadas para reducir la contaminación atmosférica
