La transición hacia la electrificación en el sector automotriz en España sigue siendo un desafío pendiente, según revela un informe reciente de la empresa tecnológica Solera. A pesar de la creciente presencia de vehículos chinos en el mercado, el país ibérico continúa siendo mayoritariamente dependiente de los motores diésel.
Los datos presentados en el informe reflejan una flota automovilística española que está lejos de cumplir con los objetivos de electrificación establecidos a nivel europeo. La falta de avances significativos en esta materia evidencia la necesidad de implementar medidas concretas para fomentar