La empresa Mahle ha logrado un importante contrato en China para suministrar componentes clave a la industria de vehículos eléctricos en expansión en el país asiático. Este acuerdo, valuado en 200 millones de euros, destaca la importancia de la colaboración entre empresas europeas y fabricantes chinos en el sector automotriz.
La presencia de Mahle en este mercado es un ejemplo de la creciente globalización de la industria automotriz, donde las empresas de diferentes partes del mundo colaboran para impulsar la adopción de tecnologías más limpias y sostenibles. Este contrato no solo beneficia a Mahle, sino que también fortalece la
